PolitiCastrerías – 162/2025
¡Pero otra vez dándole vueltas al manubrio de “la-máquina-del-fango”…!
¿Es que usted no aprende, DonPresidente?
¡Cachis…!
Y los suyos, a lo suyo, (a lo suyo de usted, que, a lo mejor, no de
lo suyo de ellos −digo−) dándole vueltas a la matraca del santo y seña de
temporada antes de que se les pudra en la mata.
Ay, señor. Si es que estos Doños+Doñas, con dispares carnés
de afiliación cromática y actas multicolores con el rótulo “asiento reservado”,
no aprenden ni a empujones. Ni LosHunos con lo del “tío-tío- que-yo-no-he-sío”,
ni LosHotros con lo del “que-llueva-que-llueva-la-virgen-de-la-cueva”.
Y anda que no tiene siglos lo del aviso de tomar cautelas antes de echar
a rodar consignas capaces de abrir la caja de los truenos… Sin ir más lejos, las
consecuencias de lo de ponerse casinos ya quedó consagrado en el Siglo I: Dicen
que fue un tal SanMateo quien lo dejó por escrito: “Pedid, y se os dará;
buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide,
recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá… (San Mateo 7:7-10).
No es por nada, pero, quienes no estén enfangados
en afiliaciones a creencias y obediencias de catecismo, estarán conmigo en que no
ha sido lo más atinado eso de mentar el fango en tal día como el del primer aniversario de la multiplicación de
las aguas y las preces en el Barranco del Poyo.
A poco que lo piensen, recordarán que lo del
Barranco del Poyo sucedió en plena campaña del santo y seña del fango, mantra asumido,
sacudido y espurreado con docilidad de carraquilla de ViernesSanto,
hasta que acabó por entontecer al universo para hacer bueno aquello de que lo
que se pide, se obtiene; quienes lo siguen, lo consiguen; y que, quienes se
emperran en enfangar el aire que nos corresponde respirar a todos, creyentes y descreídos,
acaban por atragantarse con la multiplicación de las aguas y las preces propias.
Yo no digo nada, pero quien avisa no traiciona. De
política entiendo poco. Pero de aquello del “pedid y se os dará” entiendo algo
desde que me dedico a pedir para otros −sin “h”−. Que nadie se olvide de que
las letanías vienen a ser proverbios divinos para uso de humanos inhumanizados.
Yo, por si acaso, ya me he puesto en
función-Moisés. Oír mentar el fango y retomar lo de fabricarme mi Arca-de-la-Alianza
en tierra de nadie ha sido una misma cosa. Ahora estoy eligiendo a mi propia
fauna entre los “nadiénes” descreídos, comenzando por la paloma de marras.
Eso sí: sin hacer de menos a mi perrilla, Pitiusa;
que, siendo una de las pocas creencias que me van quedando, no quisiera yo que se
la llevara por delante otra riada de esas que andan demandado LosHotros a
manubrio rampante mientras les llega la vez de entonar sus propias preces a LosHunos.
En CasaChina. En un Día-de-Difuntos de 2025