Jaeneando Febrero II – 19/2025
Que conste que la culpa de que este mes haga doblete es solo suya, DonMinistro, por mantenerme FrustraitaPerdía, por no decir fastidiaíta con “J” de Jaén, con ese “andanismo” que usted se gasta. Pero no vaya a creer que ese llamarse andana es escollo para una servidora. Ni se piense que cejaré. Como ya le tengo dicho, quienes me conocen bien saben que porfío en lo que se me mete entre ceja y ceja hasta que me dan la pluma verde.
Ya le contaré lo de la pluma verde.
Le diré, DonMinistro, que, después de llevar meses mandándole esquelas sobre lo del AVE a Jaén, y a pesar de ser usted tan largo de oído como corto de oreja, tengo yo para mí que usted oye lo que yo le digo desde estas páginas como quien oye llover. Y eso… ¡qué quiere usted que le diga! Eso no es bueno ni para este Jaén nuestro ni para mi honrilla paisanera. (Léase “autoestima”). Pero, sobre todo, no es bueno para usted, a tenor de lo tozuda que es una servidora cuando se le mete algo en la cabeza. Así que no debiera usted hacerse ilusiones de que más antes que después vaya a venir el tiempo a acallarme a mí y a librarle a usted de la pejiguera pedigüeña con la que persevero en lo de instarle que qué hay del AVE a Jaén.
No quisiera yo que tomara mis palabras como lo que no son. Lejos de mí la ordinariez de lanzar amenazas como quien lanza cohetes en la delantera de una procesión, sabiendo como sé que las amenazas, como los cohetes, acaban por consumirse en una miserable nubecilla de humo blanco tras soltar un último plof agónico, más o menos ruidoso pero inofensivo. Eso por no hablar del riesgo que corren los coheteros de que el cohete les explote en las manos antes de darles suelta.
Lo que yo me sospecho es que si no nos pone el AVE a Jaén no es por falta de parné, sino, simple y llanamente, porque no quiere. A usted le está pasando con lo del AVE a Jaén como a la del estribillo de aquello que cantaba una tal Estrellita de Palma: Mi novio fuma/ mi novio bebe/ mi novio come/ mi novio duerme…/ y no se casa.../ ¡Ay...!/ Por qué no quiere.
No, no tiene usted edad para recordar la susodicha coplilla que arrancaba con aquello de Mi novio tié’ mucha guasa/ que es mucho novio, mi novio/ porque mi novio se raja/ cuando le hablo de casorio…
Ea, no se me raje usted, DonMinistro, por cuatro duros de nada; no sea que, en lugar de tocarle el himno nacional cuando usted aparezca, le dé a la gente por cantarle con desespero la dichosa coplilla, acoplada mismamente al tema que nos ocupa: Lo pedimos hace años/ y ya somos cuarentonas/ y nos cantan por el barrio/ si exigimos en persona
¿Y del AVE, qué?
Pues del AVE, ná’´.
Pues no dicen que...
Dicen, pero cá’
Debe usté entender
si esto sigue así
se va usté a quedar
con querer venir sin poder llegar.
La letra verdadera y sin “morcillas” sigue a lo suyo. Y a fe mía que tiene su enjundia a la hora de cavilar sobre la buena o la mala memoria con la que usted pueda ser recordado en esta tierra nuestra, dependiendo de que nos apañe o no lo del AVE. Y eso porque, ya que le he puesto yo semejante tesón pedigüeño, no quisiera morirme sin darme un garbeo Madrid/ Jaén/ Madrid en el mismo día y sin acabar derrengada.
Lo del AVE a Jaén ¡Ay, lo del AVE! Como escribía en el arranque de esta nueva misiva, repito ahora el aviso: como una servidora se muera sin alcanzar de usted la gracia de que se “estire” y nos ponga el AVE, que sepa, DonMinistro de las vías, que, cada noche, en cuanto se meta usted en la cama (solo o en compañía) voy y me aparezco a usted en plan visión, lo muelo a repullos y le fastidio (con “J” de Jaén y de lo otro) eso que dicen que empieza con “J” de lo otro y acaba con lo que los franceses le dicen LaPettiteMorte, y nosotros −y usted perdone el exabrupto− lo llamamos fastidiar con “J”.
Ah, lo de la copla. Pasa como en nuestros anhelos respecto al AVE: que pareciera que su destino es tenerlos arrinconados en vía muerta. Pero aquí estoy yo dispuesta a dejarle el enlace a YouTube para que la pueda escuchar si se le antoja saber el desenlace:
https://youtu.be/zrYbDPBoJcw?si=lRRWcRB9fsAKFv2U
En CasaChina. En un 9 de Febrero de 2025