87/2021
(Micro100)
A todos los Samueles que en el mundo son, serán y pudieran haber sido.
Nunca hubiera pensado que fuéramos un simple experimento de nuestro Creador hasta que me vi gimiendo por lo que aún no había sucedido.
Llorar la muerte de Samuel fue lo más terrible; ni yo ni Samuel habíamos nacido todavía, a pesar de lo cual, mis lágrimas se desbordaban desde el acantilado de mis párpados hasta juntarse con la sangre de Samuel allá, en el suelo, donde él hacía recuento de sus últimos hálitos.
Mientras tanto, nuestro Creador samueleaba tomando notas:
“No sé si merece la pena que nazcan para acabar de semejante manera, muriendo él así, y sufriendo tanto ella.
En CasaChina. En un 6 de Julio de 2021
