VA DE...Batiburrillo literario

sábado, 5 de julio de 2025

EL PRODIGIO DE "LasHotras"

 


RuralismoProdigioso. 117/2025

        ¡Cuántas veces habré repetido yo lo que decía mi hombre recordando a su padre! “Quien no tiene un viejo en su vida debiera ponerlo”.

        No sé yo si la vejez es la mejor parada en el viaje de los recuerdos. Lo que sí sé es que hay edades en las que hablar de los lugares del pasado nos redime del dolor de huesos presente.

        Mi propio viejo, mi padre, de Villacarrillo por más señas, hablaba y no paraba de los prodigiosos aledaños de su pueblo: Batanejo, Mogón, cueva de Peinero… Él hablaba y hablaba hasta embelesarme los escasos  siete años con los que lo escuchaba, pero siempre se quedaba en suspenso cuando llegaba a un nombre que acabó por convertirse en mi particular Ítaca:

Bujaraiza.

        “Qué lástima que no nacieras antes para haberte llevado a conocer la aldea donde yo escondí mi primer tesoro siendo chiquitillo” −decía mi padre, sin descubrir jamás cuál fuera aquel tesoro−; y para mí el nombre de Bujaraiza se convirtió una especie de nebulosa habitada por todos los fantasmas y por todos los genios de la infancia de mi padre convertidos en guardianes eternos del escondite enterrado.

        En esos instantes llenos de volatilidad que todos tenemos a mitad de la vigilia y el sueño de cada noche, una parte imprecisa de mí misma sigue trasladándose a Bujaraiza, esa aldea serrana a la que ya nunca podré viajar al haberse aprovechado por los MandaMases el mismo año que me vio nacer a mí para comenzar ellos a embalsar agua hasta dejar sumergida para siempre la ansiada Bujaraiza como una Atlántida en miniatura. Nunca llegaría a verla ya más allá de mi imaginación, pero cincelé su nombre, Bujaraiza, en mi memoria para siempre; supe que era apenas una aldea a cielo abierto en la que mi padre, siendo un chiquillo, enterró su primer tesoro, y me ha afligido de por vida el recuerdo intermitente de que, de una sola bocanada, fuera engullida por el pantano del Tranco antes de que mis piernas me sostuvieran de pie.

        Mientras escribo esto, percibo que mis piernas, que tanto y tan buen servicio me vienen dando, comienzan a revenirse hacia emergentes impedimentos.

        Ellas han traído y llevado acuestas a este CuerpoMío de acá para allá por todos los caminos del mundo sin el menor miramiento, como si mis hechuras siempre cambiantes no fueran mucho más que una maleta que arrastrar, conteniendo en su interior lo indispensable para, al abrirla en cualquier sitio al que llegáramos, poder tentar con la mano por encima, a ciegas, y, tras desechar lo fútil que es casi todo, acabar sacando de ella mi propio tesoro: lápiz y papel que me reconstruyen y me hacen sentirme como en casa.

        Ahora que este cuerpo mío comienza a renquear y ladearse en busca del banco más próximo en cualquier parque donde sentarme a tomar alientos, procuro viajar acompañada por esas personas a las que me gusta llamar “Atanoras”, término que tengo definido y aclarado a mi manera en mi eterno “EXPRESIONARIO DE MÁGINA” de la siguiente guisa:

ATANORA: Femenino de ATANOR. Las Hotras; las que comunican y trasiegan agua, refuerzo, frescura o entendimiento entre dos secarrales, inconveniencias o desavenencias.

CUCHICHEOS: Pues claro que no existe la palabra “ATANORA”, ni la he escuchado nunca en SierraMágina. Pero lo mismo da que da lo mismo. Este EXPRESIONARIO de SMB me lo estoy trabajando yo, y me tomo el derecho de inventarme palabras y palabros a granel. Para mí ATANORA es el femenino de ATANOR, y la aplico a la persona comunicadora de pura raza; esas gentes capaces de facilitar el trasiego y acoplar al mundo de lo que pasa en el mundo con el mundo de los que están a verlas pasar mientras se atoran en su sequía por falta de “atanoraje”.

        Quiero decir que busco esa compaña viajera, más que nada para no tener que seguir hablando a hurtadillas con los papeles habiendo tantísima persona con la que poder hablar con embeleso.

        El penúltimo viaje, −me refiero a viajes de larga distancia− lo hice a Marruecos; el último viaje fue a París. En ambos fui en compañía de Gloria Nistal Rosique, una colega JuntaLetras con la cabeza tan bien amueblada, y tan organizada en lo de buscar asiento cuando el cuerpo no da más de sí, que viajar con ella se convierte en puro disfrute capaz de aplazar la hora de dar de mano en esto de seguir andando. Así ha sido cómo ella se ha convertido en una atanora, en una de mis Hotras preferidas, entendiendo por “Hotras” lo que primero escribía Unamuno[1] para hablar de lo innombrable de aquella DobleEsapaña que nos partió para siempre el corazón a los españolitos; luego remedó David Uclés dentro de los figurantes de su deshabitada “Península”, y ahora hurgo y espurreo yo en lugares varios de ese EXPRESIONARIO DE MÁGINA que lleva ya veinte años de andadura sin acabar de llegar a destino.

        Somos Gloria y yo unas “Hotras” que en París nos encontramos con otras “Hotras” llegadas desde SierraMáginaBendita, Monstserrat y Tana, quienes me hicieron reparar en lo imprescindible que es para NosOtras, las mujeres, poner en nuestras vidas unas “Hotras” que nos ayuden a remontar montañas mientras el cuerpo aguante y sepan buscar bancos en los parques de cualquier ciudad cuando el cuerpo pide armisticio.

        En ese último viaje a París, y haciendo la consabida visita por la ciudad en el piso de arriba del autobús turístico, recordé la anécdota que cuenta Cossío sobre Unamuno a propósito de la ciudad de la luz. Refería el autor de “Confesiones” que, cuando Blasco Ibáñez se deleitaba mostrándole a Unamuno la Opera de París[2], le preguntó entusiasmado, palabra arriba, palabra abajo: ¿Se puede echar de menos algo ante este prodigio?

        A lo que Unamuno respondió sin una dudarlo un instante: “sí; echo de menos Gredos”.

        Cuando pasábamos por la Ópera en París, a punto estuve de decirle a Gloria que, salvo SierraMágina, en ese momento no había nada más que se pudiera echar de menos.

        Entonces recordé nuestro viaje por el Atlas. Y guardé silencio.

        Se que las montañas, sean las que sean, son ahora unas insurrectas siempre dispuestas a declararle la guerra a este cuerpo mío tan harto de trincheras. Las montañas se han convertido en mis particulares “Hunas” de referencia.

        Mis compañeras de viaje son las “Hotras”: las “Atanoras”.

 

En CasaChina. En un 6 de Julio de 2025

 

HOY, "SEXILIO" RURAL

 

RuralismoProdigioso - 116/2025

   Lo acabo de escuchar en la radio --SEXILIO-- para referirse al peculiar exilio que sufren los que viven su sexualidad de manera diferente en el mundo rural y, mientras lo incorporo a mi <EXPRESIONARIO DE MÁGINA> como irrenunciable regalo emocional, me estremezco.

      Vienen a mi mente un puñado de nombres que siguen allí, en lo rural, abriendo camino para las personas diferentes a costa de su propio dolor, y no puedo por menos que ponerme a hacer lo único que todavía puedo hacer sin que me duela la memoria de los tiempos de los que vengo. Decirlo por escrito:

Vuestro íntimo y valeroso sexilio rural es nuestro referente vecinal como aprendices de grandezas doloridas.

     Permitidme que, desde mi más profundo respeto a la conciencia del amor que habéis sabido y querido revelar para enseñarnos lo que es la verdadera intrepidez, os abrace, valientes sexiliad@s de mi tierra, llena como estoy de tanta gratitud como humildad.

     ¡Ya quisiéramos muchos y muchas, ya!

 

En CasaChina. En un 5 de Julio de 2025

viernes, 4 de julio de 2025

USTEDES SÍ QUE SABEN, JAENERIENSES

 

Se lo tengo dicho a Cristina: ni me conmueve ni entiendo nada sobre cultura política.

Sobre la cultura de los políticos prefiero no entender.

Pero me conmueve hasta las lágrimas la AsertividAd en la culturA de AlgunAs políticAs emergentes.

Politicastrerías – 115/2025

        Emocionada hasta el orgasmo mental me he quedado hoy al leer esta noticia de votación unánime entre rivales para poner voz polifónica a las necesidades unísonas de mi vecindario.

    Tanto tiempo desesperando y esperando de los “SeñoresPolíticos”  algo semejante, y resulta que tenía que ser mi tierra la que nos diera esa alegría, tan ansiada como reclamada por los que, sabiendo lo que de verdad queremos, necesitamos y nos pertenece, no se nos permite hablar más que cada cuatro años más o menos.

   Y es que en mi tierra, rural por excelencia, cualquier prodigio es posible a pesar de lo a trasmano que ha ido quedándose y de la cantidad de entredichos lanzados contra lo que desde siempre es nuestro por derecho.

    Cómo va avanzando a zancadas puede verse que en mi tierra, además de SeñorEsPoliticOs”, −EO…EO… EO…−, comienza a escucharse la voz de SeñorAsPolíticAs”, con la doble “A” de ArteAsertivo, que tanto abunda en nuestro género y que tantísimo talento ajeno al “catequesismo” arriman las “AA” al mandato de “creer” sin titubear, “atender” sin rechistar y “replicar” a coro y sin sonrojo la última contraseña.

    Pero, miren ustedes: esta vez va de paisanaje y no de venderías. Y han votado juntos.

    A esto se le llama asertividad, sí señores, entendiendo por asertividad esa habilidad tan sana y provechosa con la que se manifiestan quienes aspiran a ser y hacernos más grandes. Eso que, sin renunciar al respeto y apego por la causa y creencias propias, otorgan idéntico respeto al más puro estilo Volteriano por las ideas y propuestas de sus contrincantes, y reconocen la legitimidad de las creencias ajenas cuando de lo que se está hablando es del bien de la ciudadanía. ¡Rumbo y elegancia de esta raza vieja/ que gasta diez duros en vino y almejas/ vendiendo una cosa que no vale tres![1]

    Me habéis alegrado el día, compatriotas jaenerenses.

 

En CasaChina. En un 4 de Julio de 2025



[1] “FERIA DE ABRIL EN JEREZ” de JM PEMÁN.

lunes, 30 de junio de 2025

OPCIONES PROPIAS

 

BreveMás32 - 112/2025

    Recuerdo que por entonces envejecer era como una ensoñación madrugadora.

        Entonces me dije: mientras dure la obligación del ponerse en pie del día a día, habrá que irse buscando algo que luego despierte las ganas de echar pie a tierra cada día.

 

Elegí escribir

En CasaChina. En un 30 de Junio de 2025

LA MULTIPLICACIÓN DE LAS AGUAS Y LAS PRECES

  PolitiCastrerías – 162/2025 ¡Pero otra vez dándole vueltas al manubrio de “la-máquina-del-fango”…! ¿Es que usted no aprende, DonPresid...